Latido en la oscuridad, a punto de morir. Tenues destellos a
mi espalda, no puedo encontrar un lápiz ni tampoco un papel. Con miedo de
hablar y recurriendo a la suerte para tomar decisiones. Ya es la segunda vez
que pierdo esta oportunidad, ¿Cuántas más vienen? En esa costura, los hilos se deshilachan,
vuelvo a perder. ¿Ritmos? ¿Dónde estoy? Palabras, palabras en la cabeza… nada
real, nada se convierte en etéreo.¿Te volveré a ver? Otra historia sin empezar. "Hola te he visto…"
Es solo una ilusión. Líneas que solo entiende mi cabeza,
canciones que son las adecuadas, mensajes explícitos en lugares implícitos. Ese
gesto de decepción… o de ilusión sesgada…quizás es un adiós… tal vez es un “sabes
que te voy a amar siempre”.
Esa observación, ese sol que aún no ha nacido, tratar de
recordar los detalles por si se vuelve a aparecer, pero lo dudo. No creo que te
recuerde.
El peor momento es cuando la ves alejándose lentamente… Una
despedida que no logró escuchar. Escenas importantes sin banda sonora, qué
desolador instante. Sé que estás a mis espaldas, pero no me atrevo a mirar,
todo está tan nocturno, regresivo, extinguiéndose lentamente, segundo tras
segundo. ¿Adiós? Ni siquiera adiós, soy un cobarde. Desespero.
Llegaste…Adiós